- ¿Dónde está el Mercado antiguo? Me interpeló desde la puerta de 1 precioso Lancia monovolumen color crema con todas las medidas de precaución ambos.
- Éste es el sitio que nos tienen reservado, a espaldas de 1 caserón solariego entre la plaza circular estilo Chinchón logrado como no podía ser menos en el pueblo vecino. Sobre su aspecto en los últimos estertores del verano todavía, hubiera roto a pedradas la cristalera del casino de Colmenar de Oreja cerrado a cal y canto no solo por ser de madrugada como por las restricciones por haberla visto más cerca delante de 1 café humeante.
- ¡Ahí no puedes aparcar, las alcancillas son para autoridades! Nos echó 1 policía local que sabía a qué veníamos. Para mí mejor, pues el día anterior estuvieron a punto de multarme en 1 casco antiguo bastante laberíntico en el recuerdo, pues nunca había ido, ni pienso volver, por aparcar en el sitio reservado para Correos en festivo. Me siguió en su precioso Lancia hasta las afueras, yo más afuera, casi debajo del cartel inspirado en la camiseta del Rayo Vallecano y el de los Kilómetros hasta Aranjuez. Ya delatados ambos, volvimos caminando sin hablar a la distancia que nos debíamos tomar sanitarios y auxiliares en campañas de antígenos en plena subida de la 4ª ola, de paso que desmiento que solo pasen en invierno. Si hubiéramos hablado le habría avisado que no solo estaban saliendo muchos casos, hasta 23 en los papeles plagados de burdas mentiras como que la gente no iba a hacerse tests y que las campañas se hacían en las bajonas de las olas, donde más de los 7 u 8, puede que 9, que sobreviví; y en gran parte desconcertantes, pues la mayoría eran aislados, aunque no asintomáticos, eso lo puedo asegurar, pues estaba en el puesto de entrada, y además de que a algunos los trajeron en coches patrulla de policía, ya cuando me estaban facilitando su identificación casi les hubiera dado yo el resultado sin sar sanitario ni hecho ningún test, cuando más cerca estuve, pues fue prácticamente imposible de cubrir 1 de los 4 puestos de hisopos. Ni siquiera fui capaz de darle la bienvenida como corresponde, aunque sí me consta que hizo muy bien su trabajo teniendo en cuenta que al notificar 1 de los casos, la propia jefa de equipo tuvo que enfundarse la bata y el buzo mientras notificaban y se cambiaban de arriba a abajo las enfermeras titulares. Al menos terminó su jornada de debut 1 poco despeinada al cambiarse de ropa. Y otra vez ya sin mirarnos siquiera caminamos hacia los coches no sé si decir a paso ligero o aliviados. Ni siquiera nos despedimos, pues al menos hubiera reconocido o recordado su voz de las conversaciones con mascarilla y casco mientras buceamos los operativos. Y no solo eso, vamos que hubiera memorizado su matrícula sin no fuera porque cuando enfilamos hacia Aranjuez me pegó 1 pasada escalofriante y hasta hoy. De eso estoy seguro, pues 1 de las advertencias del primer día fue la llamada curva de la muerte, hacia la que aceleré por si se había estrellado por la única carretera que nos recomendaron. Doy fe, 1º de que la superó perfectamente sin estrellarse por donde no solo se estrechaba a carril único la carretera por encima de 1 puente a peralte cambiado con forma de Z. Yo también sobreviví, y que recuerde fue la única vez durante la pandemia que me salí del mapa unos metros por donde hace forma de rabito.
Pateo los senderos de Polvoranca hace décadas a caballo de los siglos cuando se puede tanto monta monta tanto como la senda al cajero automático. Para enjuagar pérdidas porque por dar no dan ni agua, todo para los ojos participo en los concursos fotográficos de un colectivo que ha crecío como una flor en el Centro de Recursos del Parque. Debo estar en racha porque me llaman para las entregas de premios, para premio el piscolabis de olivas curás con ajos enteros curaos como las aceitunas, crudos y curaos con especias que luego vuelves andando a propulsión, busca la soledá. En la proyección audiovisual de miradas sobre el Parque que preceden al acto de entrega de premios en sí y la blanca aparición de los ajos entre las olivas había varias caras conocías, 1 de las caras resultó ser de las premiadas, ganadora además de la última convocatoria.
- ¿Tù te souviens de moi?
- Por supuesto, eres Enfermera del Hospital Severo Ochoa de Leganés, pues se lo tomó como una broma y no, qué va, la hija de un compañero de habitación del último ingreso que amás ya nos habíamos reconocío de antes de los 18 (edad) en sus visitas a su simpático padre. En Miss souvenirs anteriores no había Enfermeras pinchándome ni entre interrogantes sobre evacuación de líquidos y sólidos, se asemejaba a otra Woman object corporal mass 18 % que hubiera o hubiese conocío on the bar. pues tampoco, en plena prehistoria con cámara de negativos en blanco y negro de 6 x 6 centímetros ahora incopiables y puede que perdibles en varias mudanzas de hipotecas se me aparece vestida de negro oyendo el mar madrileña en una caracola años 90 que entonces no había silueteaos porque no se habían inventao todavía el canon corporal mass 18 %.
Se lo cuento, empieza aquí, sigue siendo Love Spain.
- España huele a ajo, 1 tonto 1 idea ya vale, a veces otro haciendo sombra o a la sombra o en la sombra, mucho Sol, arroz, no frotarse los ojos, que sus ojos se lo agradecerán, larga vida, socialistas, planificación, Seguridad Social, Alfonso, ZP con su doble, mi libro, revelaciones en el sentido fotográfico de la palabra, Felipe, el dios socialista se fue. Sendero luminoso, ya lo dije, enfermeras y enfermeros para nosotros y para England, no quieren sexo en los hospitales, exilio puntual, camuflao y limitao para los que no controlan los nervios, Larra en la cabeza, tuberculosis y fiebre en el recuerdo, Gustavo Adolfo Bécquer dirigiendo periódicos, no se olvide, la foto de Antonio Machado en sus últimos días es lo que fuimos, quieren otra vida en otro lado, pero los socialistas queremos morir bien después de vivir mucho en ésta. Somos socialistas, somos vividores.
- España huele a ajo, qué piropo nos tiró esa mujer llamada Victoria Adams expulsada por la dama de hojalata en plena cruzada de la masa corporal 18 %. Nos gusta el ajo, nos huele mejor cuando los pelamos, lo peor es que nos hemos quedao conformes enamoraos todo el rato. Si a diferencia de la française, la lengua castellana no obliga a que aparezca el sujeto obligatorio por el procedimiento de la elipsis de lo que ya se entiende por demás y se da por conocío, ¿por qué no acabamos con la concordancia de sex entre el sujeto o la sujeta, el verbo y el predicado? Me discuten la tercera: composición como procedimiento de formación de nuevas palabras a todo trapo, especialmente de las partículas o nexos de unión entre los componentes de las oraciones, como el english. Ya lo dije, Love Spain.
- España huele a ajo, hasta a mí me publicaron mi libro que por la boca muere el idiota hasta que se acabó por revelar otra falacia contemporánea, la de dedicar fondos perdidos en el pozo para buscar inteligencia extraterrestre porque sobraba lo de extraterrestre, que ni siquiera me disculpo porque me acabé incluyendo en la mayor por méritos propios, la única cosa infinita de la que podemos estar totalmente seguros con Abert Einstein que la otra mucho más dudosa era donde se suponía que se buscaba inteligencia a fondo perdido, como los árboles que se sigue prometiendo plantar antes de cualquier votación de aspirantes a tiranos. pues también puede ser infinita la comunicación entre humanos que logran articular doblemente signos que significan, que las versiones gráficas son traducciones a la lengua natural, la de cuna que es a la que traducimos todo, también la escritura.
- ¡Atención compañeras y compañeros, están disparando contra nuestro Hospital! ¿Esperamos a que lo dejen en escombros y hacemos hipotecas? Grandes urbanizaciones residenciales en Morata, en Seseña, en Las Navas y en todos laos que todo eso nos lo hemos llevao las y los socialistas. Residencia JP, Josep ganó varias veces y aparecieron como bolets en todos los pueblos y ciudades de Catalunya. Ni polifuncionales ni revierten a la parte vendiente ni nada, hipotecas y residencias. Pasqual organizó un forvm de lenguas latinas. Volvió el Premio Nobel Gabriel García Márquez a Barcelona. Los anónimos habían denunciado a la Seguridad Social porque se les había muerto alguien en el Hospital Severo Ochoa de Leganés y nosotros nunca hemos querido ir corriendo a los cementerios. Lo nuestro acaba aquí cuando nos vamos, pero amamos Love Spain, a las españolas y los españoles y más a las socialistas y los socialistas. Ya dije a los camaradas si ponemos a la gente a dieta de ajo con cualquier cosa se enamoran de una silla.
- ¿Nos casamos con las sillas? Ya vamos para viejos. La gente no me cree, es cuestión de dosis. No me creyó Felipe cuando le dije volví a estar ingresao y me ha gustao más. Noté algo en el Hospital Severo Ochoa de Leganés cuando me pusieron a dieta de ajo y de arroz y de acompañante que variaba en la cama de la ventana, pues la otra parecía la de la suerte.
- Si pasa por allí un vendedor de la lotería compro. Ya se sabe, un sitio c´est la vie, les dicen voy a escribir un libro, un libro, vale, sin sexo, sin sexo, no gusta en los hospitales, no nos gusta, bueno sí, pero que no lo echen por la tele. Felipe dijo no me hables deso mientras me enseñaba la vía directa a la traquea que le habían puesto. A los enfermeros y enfermeras, a las médicas y médicas no les gusta el sexo en las series y películas que dan por la tele porque la gente se lo cree todo, los aparatos de la tensión, el desfibrilador mejor que el marcapasos, los termómetros, los monitores de pulsaciones del corazón y luego vas y te crees que cuando están trabajando están a sus cosas, es que ni en England oiga, no señor. Que salen el fin de semana para no ir como los autobuseros, que salgan, encima que los tenemos allí vamos a querer que los encierren, como aquí, hala, y luego os vais a las cárceles a haceros fotos con los presos más sanguinarios, que os dan trabajo. Que me digan otra vez que el 25º Aniversario del Hospital Severo Ochoa de Leganés no fue digno. Que eso fuera a acabar casi como un santuario, lo de morir bien y eso no se creía, pero las niños y niños nacidos en el Hospital Severo Ochoa de Leganés corriendo por los pasillos con los bombones con forma de corazón repartiéndolos primero a las enfermas y enfermos, luego a los de bata blanca con pinta de mujer, luego a los de bata blanca con apariencia de hombre, a los familiares de los enfermos e invitados, para ellos, que algunos se saltaron el orden. Sobraron corazones. Antes decías voy a ir a otra vida, mi cura me dijo y cosas así, pero cómo crecieron las chavalas y los chavales. Quítales el móvil. El corazón rosa colgado de un pancarta, lo pintó una niña, en la fachada a la izquierda mirando desde el pueblo, el sendero con luces luminiscentes que se señaló todo el camino hasta sus puertas, traer a Abimael Guzmán, a Romay Beccaria que era Ministro en el 10 Aniversario, Alfonso Guerra se ingresó toda la semana. Si esto lo hice yo, cómo ha podido caer antipático Alfonso. Ya lo dijo Abimael, sendero quiere decir camino y luminoso pues no vamos a decir nosotros estrella de Belén, por tanto luminoso. El tío vio una jaula de las que usan para llevar las sábanas y quiso meterse dentro para que le hicieran fotos. Vale, Abimael, pero no te empujamos, estate tranquilo. ¿Y los corticoides o corticosteroides? qué ricos al principio. Si ya lo dije, que veo alucinaciones, que me ponen mucho, bueno, eso no, la gente que no sabíamos que eso lo producía el propio cuerpo y que nos los ponían por dosis marcadas por auténticos especialistas como el que me diagnosticó la disfunción o desequilibrio de mi glándula tiroidea triunfó en el juicio contra los médicos del Hospital Severo Ochoa por las sedaciones a gente que murió luego. Dijo que él no sabía apenas nada de la muerte, sólo de dosis, de sustancias, de principios activos, de lo que le cuentan algunos pacientes pesaos. Pensé regalarle una Antología Poética de Quevedo para que se preparara para la puta cárcel y que como se le daban tan bien esos sitios que viniera al mío. Los juicios empezaron a hacerse en las plazas de al lado de los juzgaos y luego fueron convirtiéndose en la diversión preferida de los españoles y españolas. El Tribunal Constitucional también prohibió el sexo en los ambientes judiciales, Love Spain.
- España huele a ajo, el país del amor. ¿Quién nos iba a decir que íbamos a acabar enganchaos a una percha con la bolsa colgá, tranquilos y felices? El cambio tranquilo, lo dijo ZP, que parecía que esperaba siempre hasta el final para hacer las cosas que había prometío. Triunfó como nadie ha triunfado nunca, a parte ZP y JP, el compañero Tomás Gómez, el chaval que fotografié para los carteles recién salido de las primarias en sus primeras Elecciones Municipales, el Alcalde de Parla que hizo su Hospital de la Seguridad Social. Qué feliz soy, qué bien muero, qué pedos tiro, qué emociones soporta mi pobre corazón con pastillas, aunque me dijo el Tribunal Constitucional que no hablara deso, pues no hablo, hala. Además de la presunción de inocencia y los procedimientos abreviados, como que se hacen los juicios en la calle para que vaya la gente, quisieron quitar también de la Constitución Española 1978 que proteje la producción literaria. nada, ni sexo ni literatura, juicios como en Las avispas de Aristófanes o como en la Atenas clásica, que vinieron aquí a verlo para creerlo. Algunos tenían su gracia, sobre la muerte, sobre atropellos, sobre pegar a viejos, mafias de amiguetes que se unen todos contra uno en los joíos trabajos, algunos más literarios y peliculeros The long goodbay de Raymond Chandler, que me tiran el chalé, fraudes en cambios de propiedad como que esto lo compré pero sigue siendo del que me lo vendió. Siempre gustaban las médicas y los médicos que llevaban, qué look la clasecragia del personal sanitario, hice fotos de pastillas y salí en anuncios.
- Qué gusto enseñar mi rectoplastia. España huele a ajo. Las charangas iban disfrazadas de hospitalizados en pijama con bolsas de corticoides en perchas con ruedas ofreciendo dieta hospitalaria, gazpacho y arroz delicias a los desfiles de Carnaval, la gente se los quería llevar puestos a la muerte, a mí la vía no me la quitéis, la vida ya la pierdo, pero la vía es mía, el termómetro si sobran también me llevo 1, que tengo 36,8º desde 2009. ¿Qué van a sobrar? Lo vi cuando disparaban sobre el Hospital los economistas metidos a políticos metidos a polemistas televisivos: comprar termómetros, aparatos de la tensión, desfibriladores mejor que marcapasos, que ya se quedaron atrasados, una reserva nacional de corticoides en Gredos, otra en el Gurugú con mi voz operada de anginas, que a mí me operaron de anginas. Julio César Iglesias me hizo leer en RNE con ejemplos Francisco de Quevedo muestra a Flora la brevedad de la vida para no malograrla. Pues a mí me gustó cuando me operaron de los ojos a los 44 años, creo que fue mi declaración más lograda y luego dije que me caí en la zona 0 desde las escaleras mecánicas hacia atrás, que ya se sabía que ahí precisamente hay cámaras, pero que si lo grabaron que lo borren que a naide le gusta ver penas. Dije que la mejor imagen no son las que hacen los fotógrafos, sino las cámaras oscuras, es decir, los ojos mecánicos. Aprendí control de peso en una semana, para subir, para mantenerme, por fin cociné, que lo llevaba dentro. Doctores estrellas judiciales me estabilizaron con corticoides y dijo te saco el tiroides con una pastilla radioactiva. Oye tú, que han dicho que en el futuro tendrán éxito las novelas que hablen de lo que hay dentro del cuerpo. Chas, chas, chas, 2 enfermeras por el pasillo a las habitaciones, una viene con los termómetros, la de los ojos bonitos con el tensiómetro, por el otro lado trurú trurú trurú trurú la merienda, mas después el chaval de los medicamentos, dice un cartel que los familiares no pueden estar en los pasillos pues los familiares en los pasillos, si lo dice en el cartel los familiares en los pasillos. Que no, pues vale, al mirador un rato y los que se pueden mover, pocos, ¿humo?, naide te puede decir nada en la puerta del velatorio. Mátate tú si te escapas del Médico.
- También puede ser perfectamente un enfermo curao el que haga la novela sobre lo que pasa dentro del cuerpo humano, que Franco inventó la Seguridad Social. Que en Englang quieren enfermeras y enfermeros españoles. Vale, a aprender english los que quieran. Victoria hizo de hada blanca y el ajo, Allium sativum es también una Spice girl. Al loro que a ésta nos la quedamos, dijimos cuando engordó unos kilitos. Bueno, y el éxito definitivo: somos números señoras y señores, somos números. todo el mundo cantando la lotería. Ala, 120 años, 140 años, 187 años, Eufemiano Fuentes a los geriátricos una temporada. Que siembren los jóvenes. Eso me recuerda que esto empezó para mí cuando Fidel se puso malo. En otra operación me tocó la final de Gran Hermano del del pijama como los del Hospital Severo Ochoa y la muerte de Rocío Jurado que nosotras los españoles también nos tocó ser gente dura. La gente decía, que contento que lo veo, a mí no me llega ya, lo veo venir, claro, sonaban perchas rodando por las aceras, la España de los zombis, un yonqui te enseña... a pincharte, claro, ¿a qué va a ser para lo que quedamos?. ¿Quién inventó lo de atiborrar a las embarazadas con ajos? Algún loco, lo digo porque a mí me tocó una mujer embarazada de juez otra vez que me encarcelaron porque decían que yo había hecho y fotocopiado el libelo contra los chulos que he llegado a pensar que ni siquiera existió, pues parecía que lo habían sacado en la imprenta secreta de la policía a ver quien picaba, como los videos para cazar pederastas que cuelga la policía en internet a ver quien pica. Pues nada de sexo, tranquilos amigos, si quiere el señor le pincha a usted Jose, lo dice su chapita. A los locos no los hemos sacao de allí y a los deficientes no les damos corticoides, pero se demostró que un operao del colon puede estar comiendo por la boca mientras le inyectamos suero y le estabilizamos con corticoides por la vía en el mismo instante. Dieta mediterránea. ¿Y la legión para sacar gente de España? Nos valen más los aviones de transporte de alimentos y tropas porque claro, vas a dejar que ellos coman lo de allí, bastante que nos matan a algunos cuando están por ahí. Alguien había dicho la huerta de los ajos para el Hospital de Leganés en 1986, si fue Felipe si fue Alfonso, qué más dá. Claro, quién iba a caer, menos mal, que los ajos se pueden plantar en las macetas y que una maceta se puede poner una encima de otra y que puedes subir un recto hecho con veneno que las ajeras lo soportan to. En España no nos faltan ajos ni siquiera antes de nacionalizar la producción. Y miel además, no hice un corral pero sí compré un par de colmenas y las planté, hasta estuve a punto de entablar conversación con mis mascotas, que hablan entre ellas. Dijeron que los françaises habían inventado una filoxera para el ajo y nos los iban a erradicar, pero nada se sabe. Toma France, los cuarteles en las esquinas de las Pedroñeras, ven si quieres a por ellos. Ante el interés general en España cualquier cosa que se diga de los ajos es de publicación libre, cuanto más se sepa mejor. Y nos los dieron a España. Nosotros ajos. España huele a ajo. Y además si llueve en agosto, níscalos a tutiplen para el otoño. Revientan los hospitales de cajas que les llevan los ejércitos.
- Oiga doctor, ¿qué son los corticoides? Oye usté, que de eso sólo y únicamente podemos hablar los médicos, pero tu busca en Google y me preguntas lo que no sepas. Y es que nos enamoramos hasta de las cosas cuando los ajos nos besan el corazón. Si no sacamos gente de España ya no podríamos tumbarnos. Buen invento el de los cultivos en vertical. Luego dicen que no inventamos ni una fregona. Que nos tienen que llevar en las camas y las sillas de ruedas con la percha, pues nada, se traen porteadores por temporadas. Hasta se ponen moraos con los ajos. Miá que guapas se nos van las mujeres de Iran. Qué guapas y qué guapos nuestros niños desde que prescribimos ajo a las embarazadas. En Miss Mundos hemos empatao con Venezuela, hala, Chávez. También viene a vernos Néstor Kirchner y una vez trajo a Alberto Fernández, que dijo que quería dulcificar el Código Penal de Argentina e igualar las penas que se ponen a los ricos con las de los pobres pero contando por las de los ricos. Ahí está Alberto, nosotros socialistas, sufrimientos los mínimos. Este vié a casarse aquí, pues otro, hala. ¿Que ganamos en las olimpiadas, en los mundiales y en los campeonatos de cualquier disciplina deportiva? ¿Que nos dopamos? No, nuestros deportistas ajos y arroz desde la cuna y el Doctor Eufemiano Fuentes, que nadie le quita que sea un lumbreras, con los viejos. Un tonto y una idea y anda, dile a Cervantes que en España íbamos a acabar poniéndo un sueldo de 1.000 al mes con 2 pagas extras sólo por ser españoles y que te puedas ir a trabajar en lo que sea tus 8 horas, gracias a la Seguridad Social también cuando no puedes trabajar, toma 1.000 para que te animes. Eso es socialismo. La gente se ofrecía para experimentos, querían que probáramos con animales los muy jilipoyas. Sí claro, y lo tiramos por las alcantarillas. Y aquí estamos, llega tu ratillo, te chutan la dosis por la vía y hala, despacio que no puedes correr, si quieres di que te has puesto malo y te dió fiebre y hala, al balneario. Qué país, no hay otro. Si hasta querían que la Seguridad Social pagara por los que habían muerto en los hospitales. Mira cómo han acabao en otros países, viniéndose aquí. Mucho sol, claro, mucho ajo, mucho arroz, corticoides para las dosis y para si pasa algo, exilio camuflao para los que disparan contra los hospitales y los que pegan a los viejos. Corticoides a tutiplén y luego paga a las familias de los que se mueren. Aquí no, esto es España. Cuando se disolvieron los otros partidos había índices de votación del 97 % para los socialistas. Ya no votamos. Bueno y qué, ¿vamos a dejar que la gente se ponga nerviosa? Celebramos el año 8 sin décimas de fiebre, no se conoce casi ya, sa erradicao entre los españoles la fiebre. No se puede decir lo mismo y por desgracia de la gastroenteritis y es que la gente no escarmienta. Hala, un asao al horno y luego licores de hierbas que de hierbas tienen poco. La foto de Antonio Machado en sus últimos días removió las conciencias de la gente cuando la sacamos de cartel electoral. Nos dijeron de todo, entre otras lindezas que no sabíamos hacer publicidad electoral. Luego no se oyó hablar deso desde la jornada de reflexión. ¿Pero para qué sacamos eso ahora? como se hacía antes con las fotos de tísicos de otros países, o qué te crees, ¿que la gente se convence sola? Una cosa es que se enamoren de lo que sea gracias a que el ajo es gloria para el corazón, pero hay que comprar cámaras para seguir las revelaciones, hay que comprar desfibriladores para ir sustituyendo los marcapasos, que una cosa es que te pases y otra mejor que valga para cuando te pases de pulsaciones o tengas pocas, además los marcapasos son como las operaciones de anginas con la diferencia de que los marcapasos se pueden sustituir y poner desfibriladores, se rompen termómetros, la gente se lleva los pijamas de los hospitales y eligen los buenos. Hala, para cuando estés en tu casa, pagamos tos. Sa pensao, que ya se sabe en España que hay gente para todo, aprovechar energéticamente los pedos, y que no se nos vayan al aire o para hacia los françaises o compactar las rectoplastias como abono ya que sabemos aprovechar también los corticoides que producen nuestros cuerpazos en demasía. Mucho mejor regalarles a les françaises los camiones y nos compramos aviones. No se crean, hubo un tiempo en que quemaban los camiones porque decían que olían a rectoplastia. Ellos sí que huelen a rectoplastia y porque la envidia no se huele.